Los trabajadores de Petrobras Brasil denuncian prácticas antisindicales

La FUP (que es parte de la CNQ/CUT, a su vez afiliada a IndustriALL Global Union) inició una huelga legal hace 30 días para denunciar el impacto de la privatización de Petrobras en las relaciones laborales. Asegura que la drástica reducción del número de empleados conduce a una sobrecarga laboral, al riesgo diario de accidentes y al incumplimiento del convenio colectivo.

Además, se moviliza para rechazar puntualmente la venta de la Refinería Landulpho Alves (Rlam), la cual considera que se vendió por menos del mínimo fijado por Petrobrás. La coordinadora de la FUP denunció que se trató de un proceso sospechoso donde hubo altas remuneraciones y bonificaciones que beneficiaban a los directivos de la empresa.

La organización sindical explica que, desde el inicio de la huelga, la dirección de Petrobras utiliza mecanismos para frustrar su medida de acción. Denuncian prácticas antisindicales contra los directivos de la FUP y los empleados tanto directos como subcontratados.

La gerencia general de la Rlam suspendió por 29 días al coordinador general de la FUP, Deyvid Bacelar, por liderar la huelga y prepara su despido. La FUP considera que Petrobras procede de este modo para intimidarlo y usar su castigo como ejemplo para evitar que los trabajadores se movilicen por sus derechos y puestos de trabajo.

A su vez, señala que el gerente general de la refinería prohibió el uso de una máscara protectora contra el Covid-19 que crearon los trabajadores con la frase “privatizar es malo para Brasil” y el logo del sindicato. La empresa también le impuso multas al sindicato de Bahía y desarrolló medidas represivas.

Por todo ello, la Federación sindical denuncia que la dirección de Petrobras viola el Convenio 98 y el C135 de la Organización Internacional del Trabajo (ambos ratificados por Brasil) además de violar la jurisprudencia del Tribunal Superior del Trabajo.

La FUP suspendió temporalmente la huelga el 3 abril atendiendo el pedido de negociación que hizo la empresa. Bacelar dijo que podrían llegar a retomar la huelga, en caso de que las negociaciones no avancen, que aumenten los contagios y la tasa de muertes por COVID-19 tanto en las plataformas como en las refinerías de Petrobras.

Finalmente, el secretario general de IndustriALL, Valter Sanches, le escribió una carta al Presidente da Petrobras, Joaquim da Silva e Luna donde expresó:

“IndustriALL rechaza y denuncia las prácticas antisindicales de la empresa y el acoso a los dirigentes sindicales. Exige el respeto a la libertad sindical, así como el estricto cumplimiento de la legislación laboral vigente mediante la inmediata anulación de la arbitraria sanción aplicada a Deyvid Bacelar.”